Instagram: cómo educar a los niños en un uso seguro

Si tenéis hijos o hijas adolescentes, seguro que habréis visto que se hacen selfies delante del espejo enseñando “tableta” o posando con una gran sonrisa en la playa. Estas fotos no las guardan sólo en el móvil. Las comparten en Instagram, la red social que triunfa entre los menores.

Y es que, según datos recientes de Smart me family, una app que ayuda a los padres y madres a hacer un seguimiento del uso que hacen los hijos del móvil, Instagram es la tercera aplicación más utilizada detrás de WhatsApp y Youtube por los menores. De hecho, 7 de cada 10 menores utilizan Instagram y Youtube de forma diaria, pasándose una media de 50 minutos al día.

En la misma linea, el estudio anual de redes sociales hecho por el Interactive Advertising Bureau (IAB Spain) confirma que Instagram es la red social que más usuarios ha ganado los últimos años, posicionándose así como quinta más utilizada entre usuarios de 16 a 65 años el 2017.

Por lo tanto, si queremos estar al tanto de lo que hacen nuestros hijos e hijas, va siendo la hora de descubrir Instagram, ¿no creen?

Por qué instagram “mola” tanto a los jóvenes

Foto: Mantas Hesthaven

Según Albert Anguera, padre de un niño de nueve y una niña de siete años y manager de IgersTGN, IgersCatalonia e IgersMap, la razón es que Instagram es una app de apps.

Esta aplicación, que nació con la idea de ser una herramienta para compartir fotos y vídeos directamente desde el móvil, ha sabido captar lo mejor de otras aplicaciones. “Muchos adolescentes se pasaron de Snapchat a Instagram cuando Instagram incorporó las stories, permitiendo la publicación de vídeos y fotografías que se borran automáticamente al cabo de 24 horas”, afirma Anguera.

Pero Instagram también ofrece la posibilidad de hacer grupos de “chat” reducidos de máximo 15 usuarios para conversar al estilo “WhatsApp” gracias a su función Direct. Además, sus múltiples opciones de editar las fotos con filtros, introduciendo texto, gifs o complementos curiosos abren una vertiente creativa que atrae a los jóvenes, ya que se pueden dar a conocer a través de la fotografía, una manera mucho más visual y atractiva que simples textos.

Fuente: Motivaciones sociales y psicológicas para usar Instagram – Infografia: QTZ Marketing

– Gema R. Quintana,  Universidad de Cantabria

“El adolescente no sólo busca compartir momentos de su vida o sus impresiones en Instagram, sino que también quiere reflejar un rasgo de su personalidad. Quiere mostrar su creatividad a través de las fotos que decide compartir”, afirma Gema R. Quintana en su estudio sobre los motivos del uso de Instagram de los adolescentes, hecho en la Universidad de Cantabria.

De hecho, la posibilidad de ser creativo es la segunda razón más importante por la que los menores hacen uso de la app, según el estudio de Quintana. Por delante sólo está la posibilidad de socialización, que les permite estar al tanto de lo que hacen los demás. Y, en este sentido, Mariona Prades y Xavier Carbonell, de la Universidad Ramon Llull, destacan en un articulo publicado en el 2016 que la principal actividad que los adolescentes realizan en Instagram es mirar qué hacen los usuarios que siguen (43,5%), colgar fotografías y vídeos (42%), mirar el perfil de un personaje (30,4%) y, finalmente , explorar la página de inicio (30,4%).

El tono positivo de Instagram

A diferencia de Twitter o Facebook, Instagram tiene un tono positivo, explica el instagrammer Albert Anguera, manager la comunidad de instagrammers del Camp de Tarragona. “En Instagram sólo tenemos la opción de hacer ‘me gusta’ en una foto o vídeo. No existe el botón ‘desagrada’, ni tampoco encontraremos muchas haters (usuarios con una actitud destructiva) “, explica Anguera.

Aún así debemos ser prudentes a la hora de utilizar la aplicación. “Así como no dejamos ir a los niños hasta cierta edad solos por la calle, tampoco debemos dejarlos solos en este mundo digital sin ofrecerles unas pautas”, complementa Albert Anguera.

Instagram, un instrumento para educar digitalmente

Aunque la edad recomendada de uso de Instagram es a partir de los 14 años, muchos niños empiezan antes. De hecho, según los últimos resultados de la encuesta del INE el 25% de los niños de diez años son los orgullosos propietarios de un smartphone. Con trece años y ya en la ESO, ocho de cada diez jóvenes llevan un teléfono móvil en el bolsillo. Y con la llegada del móvil, también empiezan a aparecer las aplicaciones.

Niños haciendose un selfie – Foto: Tim Gouw

– Albert Anguera, gestor de la comunidad de IgersTGN, IgersCatalonia e IgersMap

En este sentido, Albert Anguera, padre de dos niños y gestor de la comunidad de instagrammers del Camp de Tarragona, cree que para los adultos es una oportunidad para acompañarlos y educarlos digitalmente. “Instagram te ayuda a tomar conciencia de lo que ocurre cuando cuelgas una foto y del recorrido que hace por internet”, explica Anguera. Los niños deben ser conscientes de que una vez una foto está en la red, tiene vida propia y formará parte de su identidad digital. La gente copia fotos, las envía, las descarga. Es imposible seguir la pista de lo que se comparte.

Instagram también es un recurso para hablar del derecho a la privacidad de las personas. “A mi hijo le he dicho alguna vez: le has pedido permiso a tu hermana pequeña para hacer esta foto de ella y compartirla?”, comenta Anguera. Es necesario que los menores tomen conciencia de que no todo vale. Por eso nos recomienda seguir cinco pautas a la hora de que los niños abran una cuenta de Instagram por primera vez.

Cinco pautas para un uso seguro de Instagram

Crear una cuenta privada (nunca pública) 
Cuando nos damos de alta en Instagram, la aplicación automáticamente activa una cuenta público que todo el mundo puede ver. Desde las opciones del perfil, podemos hacerlo privado. Es una buena práctica que los menores tengan un perfil privado, ya que de esta manera sólo los usuarios que ellos autoricen pueden ver las fotos y vídeos que publican. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que el nombre de usuario, la foto de perfil y la pequeña biografía que acompaña el avatar siempre serán públicas para todos y por lo tanto hay que valorar qué información queremos dar en este apartado.

Solo autorizar y seguir a gente de confianza
Como la vida presencial, es mejor moverse en círculos conocidos, como amigos y familiares. Es una manera de reducir la posibilidad de estar en contacto con contenidos y comentarios inapropiados. Por ello, es importante explicar a los niños que sólo deben autorizar que les sigan personas con las que tengan un cierto grado de confianza.

No vincular la cuenta con Facebook
A la hora de crear la cuenta de Instagram, hágalo con un correo electrónico, no con la cuenta de Facebook. De esta manera será más fácil mantenerlo privado.

Activar la opción de etiquetaje manual
Si queréis que vuestros hijos e hijas puedan elegir en qué fotos los etiquetan, activad la opción de incluir de forma manual las fotos en las que aparezcan. De esta manera recibirán un aviso cuando alguien les ha etiquetado. Esta opción se puede modificar desde el perfil seleccionando “Fotos en las que apareces”. En todo caso, si los niños tienen el perfil privado, por mucho que los etiqueten, las fotos sólo serán visibles para aquellas personas que los siguen (y han sido autorizadas previamente).

No geolocalitzar las fotos y videos
Es necesario que los menores tomen conciencia de la información que dan de sí mismos y de su vida off-line cuando publican fotos. Si las geolocalizan, están dando información que puede revelar donde viven o cuáles son los lugares que frecuentan.

Trucos para hacer un seguimiento del uso de Instagram

La pestaña para “Explorar” a Instagram (la lupa) muestra vídeos y fotos relacionadas con los intereses del usuario y no sólo las tendencias. De hecho en este apartado es posible encontrar fotos y vídeos que han sido marcados con un “me gusta” por usuarios a los que vuestros hijos e hijas siguen. Echando un vistazo a esta pestaña en el Instagram de los menores, tendréis una visión general sobre qué buscan y miran vuestros hijos e hijas en Instagram.

La opción de autenticación en dos pasos, además de reforzar la seguridad de la cuenta, puede ser una manera de controlar el uso de la aplicación por parte de vuestros hijos si les habéis requisado el móvil por un rato. Cuando la autenticación en dos pasos esté activada, se pedirá que se introduzca un código de seguridad SMS o un código de recuperación (que debería llegar al móvil de los padres, si este se ha introducido con anterioridad), cada vez que los niños inicien sesión en Instagram desde un dispositivo desconocido.

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