Mirador sobre la Montaña de Santa Bárbara, gran inspiración de Picasso – Foto: YouMeKids
A los 16 años, Picasso pasó ocho meses en casa de su amigo Manuel Pallarès, en Horta de Sant Joan, esperando que los aires del macizo de los Ports le ayudaran a curarse de la escarlatina. Más tarde volvió al pueblo porque, según decía él mismo, en Horta aprendió todo lo que sabía.
Vídeo grabado durante el Ciclo dels Petits Grans Genis del Paisatge dels Genis.
Os invitamos a pasear por las calles con legado renacentista y disfrutar del color del paisaje y las panorámicas que inspiraron a Picasso. Cada pequeño rincón tiene su historia. Fíjaos en la casa frente a la iglesia. Hace años Picasso la usó como estudio. Allí su amigo panadero le dijo que “pintando así, no te ganarás la vida”. Y es que Picasso ya había empezado a dar el paso hacia el que sería el cubismo. Junto al estudio encontraréis el antiguo hostal Trompet. Ahora sólo hay una placa que recuerda el lugar desde donde Picasso disparó varios tiros al aire, enfadado por las piedras que le habían lanzado a su balcón. Y es que las vecinas del pueblo no les parecía bien que compartiera habitación con una mujer sin estar casado con ella!
Si os váis al Centre Picasso descubriréis en qué mesa jugaba el artista al dominó con su amigo Pallarès, o podéis tocar el caballete original donde el artista pintó tantos cuadros cuando estudiaba en la Llotja de Barcelona. También os ayudará a haceros una idea de cómo el artista pasó de la pintura y el dibujo más realista a simplificar sus obras con formas geométricas.
Y si queréis estirar las piernas, id al lugar donde Pablo Picasso estuvo a punto de ahogarse … si no fuera porque su amigo Pallarès lo salvó de caer al río Estrets. Seguro que fue el imponente paisaje, bajo el espectáculo de las Moles del Don, que despistaron al joven Picasso. O quizás fueron los vigilantes del río: los buitres y las águilas.
Los más aventureros deben aprovechar para ir a encontrar la cueva donde el pintor pasó todo un mes durante su adolescencia. Montsport convertirá la búsqueda de la Cueva de Picasso en toda una competición. Equipados con un mapa y una brújula, deberéis encontrar las balizas que os guían hacia el escondite del artista antes de que los otros equipos. ¿Preparados?
Un fin de semana picassiano redondo para descubrir la vertiente más personal del artista!
De camino hacia la Cova de Picasso – Foto: YouMeKids
Dónde comer:
En el Parc dels Ports y a unos 4 km de los Estrets encontraréis el área del Mirador dels Ports, con una zona de juegos, una fuente y mesas de madera con bancos. Cerca de la Cueva de Picasso está el área recreativa de la Franqueta con columpios, mesas de piedra, fuentes y servicios. Si preferís un restaurante de cocina catalana, podéis hacer parada en el restaurante Miralles, ubicado en el mismo pueblo de Horta de Sant Joan. Disponen de una buena cocina, menú infantil y tronas.
On dormir:
Los apartamentos rurales La Farinera están equipados con todo lo que una familia pueda necesitar. Hay una cuna, una buhardilla con camas que despiertan la fantasía de los más pequeños (sólo en los apartamentos para 6 personas) y unas panorámicas inmejorables sobre las Rocas de Benet.
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