Educación de perros: dudas más comunes

Patricia Gonçalves con la perra Lluna en el Salón de Mascotas Bestial – Foto: YouMeKids

La mayoría de veces, cuando decidimos incorporar un perro a nuestra familia por primera vez, sólo pensamos en lo divertido que será pasearlo, lo bien que se lo pasarán los niños jugando a la pelota con él y cuánto amor recibiremos del animal. Pero olvidamos que los perros no nacen sabiendo qué queremos de ellos. Hay que educarlos. Y aquí es donde se puede complicar la cosa. Hay que aprender a entender al animal y, sobre todo, hacernos entender para reforzar los comportamientos deseados.

Patricia Gonçalves, educadora canina profesional, explicó el pasado fin de semana a los asistentes de la novena edición del Salón de la mascota Bestial, celebrado en Fira de Reus, que la clave está en la construcción de una relación positiva y de confianza con el perro . “Mucha gente castiga en vez de premiar”, explica Gonçalves. “Hay que encontrar lo que motiva a nuestro perro y usarlo como premio para reforzar lo que hace bien”, continúa esta profesional que desde 2009 trabaja en el campo del adiestramiento y terapia de perros.

Patricia Gonçalves haciendo el truco de la mano màgica para captar la atención del perro fen la Feria Bestial – Foto: YouMeKids

– Patricia Gonçalves, educadora canina profesional

La comida y el juego son recursos que habitualmente funcionan como estímulo gratificante, ya que están vinculados a los instintos primarios de supervivencia y de caza de los perros. Pero hay que utilizarlos de manera adecuada. Durante el taller de educación canina respondió a las dudas de los asistentes. Destacamos las respuestas a diez de las preguntas más comunes cuando nos enfrentamos a la educación de un perro.

Mi perro no me entiende, ¿qué puedo hacer?

Hay que tener en cuenta que la comunicación verbal con los perros es casi nula. El animal interpreta el tono de voz, los movimientos y los gestos de su dueño. Por eso es muy importante ser coherentes cuando queremos dar a entender algo a nuestro perro. En casa todos deben usar la misma palabra para la misma acción. Y si lo acompañamos de un movimiento con las manos, reforzaremos la asociación del comportamiento concreto con la palabra. Repetir la palabra varias veces al mismo tiempo que se lleva a cabo la acción ayudará a nuestro peludo a entendernos mejor. Y si además lo premiamos con un poco de su pienso cada vez que haga bien la acción, aprenderá rápidamente.

No tengo mucho tiempo para pasear al perro, ¿qué puedo hacer para que no se aburra?

Si queremos que nuestro perro no se aburra, debemos trabajar su olfato. El trabajo mental es más cansado para los perros que salir a correr un rato. Ocultar trocitos de pienso por la casa y hacer que los busque, es una buena opción para tener entretenido al perro. Otra opción que puede ser útil para los largos ratos que el perro está solo en casa, es usar el juguete Kong. Dentro del juguete se pueden introducir trocitos de pienso o golosinas. El dispensador se mantiene derecho hasta que el perro lo toca y se balancea ligeramente para que pueda caer la comida. El movimiento impredecible del juguete mantiene la mascota distraída un buen rato.

Enseñar a nuestro peludo nuevas habilidades (como dar la pata o caminar bajo nuestras piernas) también es un trabajo mental que exige mucha concentración y cansa a nuestro perro.

¿Qué puedo hacer para que mi perro no suba el sofá o en la alfombra?

Si queremos que nuestro perro esté tranquilo a nuestro lado mientras miramos la televisión sin subir al sofá o sentarse en nuestra alfombra, hay que darle una mejor alternativa. Podemos poner su cama al lado del sofá y dejarle trocitos de pienso o golosinas en aquel lugar. Así, si el perro recibe un estímulo gratificante cuando se estira en su cama, tenderá a repetir lo que le ha reportado beneficio, dejando de lado aquella acción que no le aporta nada.

¿Tengo que castigar a mi perro si se ha hecho pipi o caca en casa?

Regañar a un perro porque ha hecho pipi o caca en casa, sólo hará que la próxima vez el perro se esconda para hacer sus necesidades. En vez de castigarle, hay que buscar una conducta alternativa. Podemos premiarlo con comida y buenas palabras las próximas veces que salimos fuera y haga sus necesidades en el lugar correcto. Así nuestro perro relacionará el estímulo positivo con hacer las necesidades en el lugar que nos interese a nosotros (calle, pipi can, jardín, …).

¿Qué puedo hacer si mi perro está muy nervioso?

La mejor manera de tranquilizar a un perro es mediante el juego. Primero podemos darle un juguete o un mordedor. Si continua nervioso, podemos pasar a los juegos de olfato. Ocultar trocitos de comida y pedirle que los busque puede ser un ejercicio relajante para ellos. Y en último lugar, si ninguna de las últimas opciones hace efecto, podemos utilizar el rincón de pensar. Hay que dejar el perro solo con un trocito de comida durante máximo cinco minutos en un lugar aislado.

Sabremos que nuestro perro está relajado cuando tenga la boca abierta y la cola caída.

¿Qué puedo hacer para mantener mi perro a mi lado, cuando hay otros perros ladrando?

Si queremos que nuestro perro se olvide de los ruidos de la calle o de otros perros que ladran cuando salimos a pasear, es necesario que aprendan a centrarse en nosotros. Y esto lo podemos conseguir jugando. Un truco es usar la “mano mágica” cuando se distraen. Lo que hacemos es dejar caer pequeños trocitos de pienso o golosinas entre los dedos de nuestra mano. El perro intentará cogerlos y se olvidará de la otra distracción, porque está centrado en nuestra mano.

¿Qué puedo hacer para que mi perro deje de exigirme cosas?

Si nuestro perro ladra para exigir que lo mimemos, por ejemplo, hay que cambiar su punto de atención. En vez de mimarlo, le podemos lanzar una pelota o dar el Kong (el dosificador de comida) para que se entretenga un rato. De esta manera aprenderá que exigiendo no consigue lo que quiere. Otro método probado para ayudar a evitar que el perro ladre buscando atención es simplemente ignorandolo. Sin duda se sentirá frustrado y al principio ladrará mucho, pero una vez que se dé cuenta de que no le está dando resultado, parará.

Perros adoptados. ¿Cómo puedo ganarme su confianza?

Los perros adoptados pueden sentirse amenazados por sus nuevos dueños. Si vemos que al acercarse a ellos no se encuentran bien, es mejor mantener la distancia al inicio o acercarnos de lado, sin mirarle a los ojos. Poco a poco los podemos conquistar mediante el juego y la comida.

¿Qué puedo hacer si mi perro me muerde las manos?

Para la mayoría de perros, morder las manos de sus dueños es una forma de juego. Si queremos evitarlo, hay que sustituir la mano por otro juguete. Podemos poner un mordedor o una cuerda en su boca y jugar un rato con ellos.

¿Qué puedo hacer si los juguetes no le interesan a mi perro?

Si queréis jugar con vuestro perro pero los juguetes parecen no interesarle, coged una pelota de tenis y hacedle un hueco. Introducid un poco de comida en la pelota y veréis como de golpe el balón tendrá un gran interés. Poco a poco podéis hacer el agujero de la comida más pequeño, hasta que el perro deje de necesitar la comida para jugar con la pelota.